Estos son productos que todos tenemos en casa, que son ecológicos y que nos pueden ayudar a no gastar tanto en productos artificiales, caros y contaminantes como desengrasantes, antical, friegasuelos, abrillantadores ...- Para limpiar el baño se pueden usar limón, vinagre, esencias de pino y eucalipto.
- Para abrillantar la madera podemos usar cera de abejas.
- Para hacer desinfectante las proporciones son 1 unidad de bórax por 6 unidades de agua.
- Para hacer fregasuelos se mezclan agua, bicarbonato, alcohol y detergente.
- Como ambientadores podemos usar plantas aromáticas, popurrís o incensarios.
Insecticidas naturales:
- vinagre y poleo menta: actuan contra las pulgas
- limón: ahuyenta las hormigas
- clavo: espanta las moscas
- albahaca: ahuyenta los mosquitos
- piel naranja: aleja a las polillas
Con lo que limpiaban nuestras abuelas
A
Aceite de soja:
mezclado con ceniza de madera sirve para limpiar el hierro.
Algunas gotas sobre una franela hacen brillar la concha y el azabache.
Aceite de oliva:
sirve para abrillantar el nácar.
Aceite de ricino:
algunas gotas sobre un paño suave para dar brillo al calzado.
Agua de cocción de judías blancas:
es una leche de belleza para el lavado de las lanas delicadas, a las que devuelve toda su suavidad sin riesgo de que se abatanen o afieltren.
Agua de cocción de hiedra:
se usa para el aclarado de las lanas negras, a razón de 10 gr. por litro de agua.
Agua de lluvia:
con amoníaco, sirve para desengrasar los cuellos y puños de las prendas de vestir.
Alcohol de 90 º:
se usa para limpiar joyas, especialmente las piedras preciosas y semipreciosas. Sirve igualmente para desinfectar los juguetes de los niños o el micrófono o auricular del teléfono, y para quitar las manchas de bolígrafo.
Almidón:
diluido en un poco de agua fría forma una pasta que , aplicada con un pincel hace maravillas en la limpieza de los objetos de yeso o estuco.
Anticongelante:
evita que las tuberías se hielen en las casas de campo habitadas en invierno de forma intermitente.
Arroz:
algunos granos de arroza introducidos en un salero impiden que la sal se humedezca, se pegue a las paredes y tape los agujeros.
Azúcar:
frotando con un terrón ligeramente humedecido en agua, se quitan las marcas de chamuscado sobre un tejido.
B
Barro:
si no se tiene nada para quitar una mancha de grasa, usa barro. Después lavar la superficie tratada para quitar el barro.
C
Caramelo:
colocado hirviendo en un frigorífico desconectado y cerrado, absorverá, en la mayor parte de los casos, los olores desagradables, particularmente los que persisten cuando se desenchufa el refrigerador y se deja la puerta cerrada antes de marcharse de vacaciones.
Cáscaras de naranja o de limón:
calentada sobre la placa de cocina, hace un ambientador agradable.
Cebolla blanca:
cortada sirve para la limpieza de los cobres. Cuando la superficie está muy sucia, se corta y se reanuda la operación. Es referible trabajar con un par de guantes de goma.
Ceniza de madera:
humedecida con algunas gotas de aceite, se usa para limpiar el hierro y las hojas de acero de los cuchillos.
Cerveza:
después de limpiar el polvo de las plantas de interior se pasa un algodón impregnado en cerveza para abrillantarlas y nutrirlas.
H
Harina:
permite abrillantar los metales. A falta de una gamuza un paño suave enharinado sirve de abrillantador.
Haz de leña:
puesto en una piscina o estanque de agua, evita que el agua se hiele en épocas muy frías del invierno, y el cemento no se agrieta.
Hojas de puerro:
sirven para la limpieza del estaño.
Hojas de té:
húmedas, desempolvan y avivan los colores de las alfombras de lana.
En infusión sirven para teñir.
Huevo:
la yema diluida en alcohol de 90º sirve para limpiar las encuadernaciones de cuero antiguas. La clara batida a punto de nieve y aplicada con un pincel, se usa para reparar los asientos de cuero y darles brillo como si estuvieran barnizados.
L
Leche cruda:
sirve para la limpieza de esteras. Es una verdadera crema de belleza para el charol.
M
Miga de pan:
tierna y ligeramente caliente, permite quitar las marcas de los dedos sobre las puertas y los papeles pintados. Permite también limpiar los grabados sucios de humo.
Mina de grafito:
pulverizada y con algunas gotas de aceite, es el remedio más eficaz para untar las visagras de una puerta que chirría.
P
Papel de periódico:
humedecido en alcohol de quemar limpia vidrios y espejos.
Arrugado y colocado dentro de calzados de cuero que se han mojado, absorve la humedad y evita que se deformen.
Arrugado y colocado a modo de tapón en las calderas y estufas, en verano; absorve la humedad y evita el óxido.
Patata:
se usa para la limpieza de cuadros al óleo. Cuando el corte está sucio, se vuelve a cortar y se reanuda la operación.
R
Ruibarbo:
las hojas crudas limpian el aluminio.
S
Sal marina:
Humedecida con limón sirve para limpiar metal dorado y mármol.
Humedecida en agua limpia el mimbre. También quita el tacto pegajoso de las esponjas naturales sucias.
Humedecida con vinagre, sirve para limpiar las garrafas y botellas. Ayuda a quitar las manchas de vino de los manteles.
T
Talco:
asorve las manchas de grasa.
Tapón de corcho:
los anticuarios lo usan para dar brillo a estaños antiguos y maderas enceradas.
V
Vinagre de vino:
agregado a la última agua del aclarado, fija el color de los tejidos y da brillo a la seda natural.
Vino blanco:
quita las manchas de vino tinto.
Vino tinto caliente:
limpia los cobres muy sucios.
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